domingo, 4 de marzo de 2012

Orgasmo de dolor

Quisiera contarte sobre la primera vez que lloré con una película. Recuerdo que estaba con mis padres y mi madre, insospechadamente (porque ella es la más emotiva de la familia, siempre callada y sumisa esperando el gesto tibio que no llegará), me preguntaba "por qué llorás?", y yo no podía responderle, deshecha en lágrimas como estaba, fuera de la lógica, trasunta de emociones desconocidas para mí en ese entonces. No sé qué edad tendría. Y mi padre, insospechadamente (porque de él heredé mi rostro serio y mantener la compostura en todas las circunstancias), diciéndole algo como, "pero cómo no va a llorar, no te das cuenta...", etc.
Hoy escucho esa canción y siento un perfecto orgasmo de dolor, se me corta la respiración y lloro por lo conocido y lo desconocido, lloro mientras la mente se me puebla de imágenes, sollozo y jadeo como si fuera amada, presa de la maldita nostalgia de lo no vivido. En la calle, hay gente que grita por algún partido de fútbol o alguna circunstancia que no alcanzo a comprender, pero siento que están en armonía con estas notas de dolor que recorren mi cuerpo, envolviéndome por completo, dejándome absurda y marchita en algún rincón de mi conciencia.
Y lo más triste de todo, es que nunca voy a poder contártelo.

3 comentarios:

Doctor Kaos dijo...

Llorar por lo conocido y lo desconocido. Ahí me depositan la primera y última oración.

Hermoso.

Lauro Digifico dijo...

Nina, vos tenés una melancolía encantadora. Y el final de tu escrito me parte el corazón a nivel molecular.

Anónimo dijo...

Me encanta tu forma de describir tus sentimientos... Buscaba algo para una canción y termine acá. Ya ae conocí acabarla. Gracias