jueves, 29 de mayo de 2008

Como un dolor de muelas (2)

Imposible concentrarse con este tema rondando mi cabeza, como un dolor de muelas (literalmente)

Adivinen qué? hoy me ataca la monotonía nuevamente. Suena el despertador esta mañana y me pregunto: así van a ser todos los días del resto de mi vida? en esta cama u otra, despertando sola, maldiciendo mi suerte? me arrastro al trabajo y me pierdo en mi misma, escribiendo estas líneas inútiles, desvaríos virtuales. Me da miedo esta vida sin propósito, este comfort de mentiritas, esta inercia invencible. Pero me voy a seguir levantando, sin heroísmos sino por pura cobardía, alentando pequeñas esperanzas que pasarán como nubes de verano.

Quisiera despertarme y no saber nada de este mundo, olvidar la ortografía, los usos y costumbres, no saber caminar ni subir escaleras, no recordar los idiomas ni las profesiones, olvidar la escuela y la familia, las revoluciones y los compromisos. Empezar de nuevo, y romper el molde...

«El pájaro rompe el cascarón. El cascarón es el mundo. Quien quiera nacer, tiene que destruir un mundo. El pájaro vuela hacia Dios. El dios se llama Abraxas.»

No hay comentarios: